SER DILIGENTE

 

Ministerio Profético. Abriendo los ojos.

 

¿Qué es diligencia? Es lo opuesto a pereza; es no rehuir a la responsabilidad. Una persona diligente no trata de reducir su trabajo procurando no trabajar en absoluto. Por el contrario, trata de crear trabajo donde no hay. En el servicio del Señor, si no procuramos buscar trabajo, es muy posible que nos tomemos uno o dos días de descanso. No debemos ser aquellos que esperan cómodamente hasta que algún trabajo se presente. Si sólo laboramos cuando algún trabajo aparece, no somos personas diligentes. Una persona diligente nunca está ociosa; siempre está buscando qué hacer. Siempre está analizando, orando, leyendo, contemplando y considerando delante de Dios qué debe hacer. A menos que uno tenga esta práctica, puede ser que no encuentre nada que hacer. Si sólo actuamos “por lo que dice el libro”, tal vez pronto descubramos que ya no queda mucho “del libro” por hacer.

Prov. 18: 9. El que es negligente en su trabajo es hermano del hombre destructor.

Prov. 13: 4. Los diligentes serán prosperados. Mas el perezoso desea y nada alcanza.

Romanos 12:11. En lo que requiere diligencia, no perezosos.

Prov. 20:4. El perezoso no ara a causa del invierno; luego, cuando llegue la siega, pedirá y no hallará.

Prov. 19:15. La pereza hace caer en profundo sueño y la persona negligente padecerá hambre Y todo tipo de necesidad.

¿Qué es la pereza? Es dejarlo todo para después, alargar el trabajo lo más que sea posible para hacer algo. Tal vez un trabajo se pueda hacer en un día, pero esa clase de personas lo alargan para hacerlo en diez días; o quizás se pueda hacer en un mes, pero ellos lo alargan hasta tres meses. Toman su tiempo para terminar el trabajo. Eso no es otra cosa que pereza. Algunas veces esta palabra se traduce como “desocupado” (Mateo. 20:3, 6). Una persona desocupada se mueve sin ninguna meta. Nunca se decide a actuar o no actuar, y nunca se centra en lo que tiene que hacer.

En Filipenses 3:1 este término se traduce como “molesto”. Pablo dijo: “A mí no me es molesto el escribiros las mismas cosas, y para vosotros es seguro”. Tan pronto se pone algo en los hombros de algunos hermanos y hermanas, estos rehúsan tomarlo. Les es molesto. Se lamentan y se quejan. Pareciera como si se les hubiera pedido que hicieran una tarea imposible o que se les hubiera puesto encima una carga muy pesada. Pablo no actuó de esa manera. Él estaba en la prisión cuando escribió las Epístolas. En verdad, sería un reto para cualquiera escribir en una situación tan terrible como la de él. No obstante, cuando Pablo les escribió a los Filipenses, les exhortó a que se regocijaran. “Regocijaos en el Señor siempre” (4:4). En cuanto a sus circunstancias, ciertamente estaba en graves dificultades. Sin embargo, dijo: “A mí no me es molesto el escribiros las mismas cosas”. Él no era perezoso en absoluto. No consideraba que era una molestia escribirles, sino más bien, para él era un motivo de gozo. No conocía lo que era la ociosidad. En Pablo podemos ver un celo que es sobresaliente y que es común entre todos los siervos de Dios.

Los siervos de Dios no son perezosos si no diligentes y no consideran una molestia el aceptar los retos que el Señor Jesús dispone para él.  

Muchos hermanos y hermanas han llegado a ser inútiles en el servicio de Dios porque tienen temor a tomar cualquier responsabilidad. Todo les causa molestia. Siempre esperan recibir menos trabajo. Preferirían tener menos responsabilidad que más responsabilidad, o de ser posible, ninguna responsabilidad.

No tienen un carácter diligente. Si somos perezosos, estamos descalificados no sólo para el servicio de Dios, sino también para servir a los hombres. Muchos hermanos y hermanas no pueden ser siervos del Señor debido a que son perezosos. Algunos que se llaman siervos de Dios se sientan sobre un pedestal, haciéndose superiores, y pareciera que nadie pudiera decirles nada, ni tener control sobre ellos, ni tocarlos en absoluto. Se consideran siervos solamente de Dios. Si cambiaran de amo por un momento, se dejaría ver que son un fracaso total. Ni siquiera un amo terrenal les permitiría ser tan descuidados como ellos son.

Una persona así es un verdadero siervo de Dios. Nuestra manera de ser y de actuar tienen que estar ejercitados de tal manera que nunca retrocedamos ante los problemas que se nos presenten, sino que prefiramos el servicio y el sacrificio por el Pueblo de Dios tanto en el aspecto material como en el físico. Debemos preferir laborar y trabajar con nuestras propias manos. ¡Si esta no es nuestra norma, no estamos calificados para ser llamados siervos de Dios! Pablo dijo: “Ustedes mismos saben que para lo que me ha sido necesario a mí y a los que están conmigo, estas manos me han servido” (Hechos. 20:34). Él tenía dos buenas manos que no eran perezosas en absoluto; trabajaban durante el día y durante la noche. Una persona así es un verdadero siervo de Dios.

Lectura: Prov. 20:4. El perezoso no ara a causa del invierno; luego, cuando llegue la siega, pedirá y no hallará.

Prov. 19:15. La pereza hace caer en profundo sueño y la persona negligente padecerá hambre.

LA PEREZA. La pereza nos aparta de las obligaciones espirituales y físicas. Nos hace descuidar notablemente las obligaciones y deberes que nos corresponden hacer.

Esa sensación de hacer poca cosa, se resume en una sola palabra: PEREZA. La pereza (cf. lat. pigritiam, y este, a su vez, del adjetivo piger = lento, tardío, torpe, pesado) podemos definirla como la negligencia, o el descuido en las cosas a que estamos obligados (a hacer); también se refiere a la flojedad (o como denominamos en nuestra tierra gaditana, “flojera”), al descuido o a la tardanza en las acciones o movimientos –propios o ajenos-.

La pereza es la falta de estímulo, falta de deseo, falta de voluntad para hacer lo que nos toca hacer. Es una congelación de la voluntad, el abandono de nuestra condición de seres activos y emprendedores.

Es considerado “perezoso” o que actúa “perezosamente” aquella persona que renuncia a sus deberes con la familia, la Iglesia y la  sociedad.

El perezoso, abandona su propia formación cultural y social; la persona que nunca tiene tiempo para leer un libro, servirle a los demás y cooperar con su prójimo. Aquel que tiene pereza de convertirse en más humano.

El ocio –cf. lat. Otium = tiempo libre-, a diferencia de la pereza, es simplemente un tiempo que no se emplea en las cuestiones laborales. Los romanos, hablaban de ocio y de negocio, el “no-ocio”. El negocio era algo que tenía que ver con las necesidades; las personas que no están ociosas son las que atienden necesidades: se están lavando, peinando o trabajando en el campo. En cambio, el ocio significa dedicarse a lo que te gusta: el ocio es simplemente lo que haces sin que necesiten pagarte por hacerlo, y el negocio es lo que haces para tener ingresos. La pereza es, en cambio, que tú no hagas nada: ni negocio ni ocio.

El Señor Jesús, aborrece a los ociosos y a los perezosos. Pero ama y prospera a los diligentes. La diferencia entre un diligente y un perezoso es el trabajo.

 

El hombre nuevo creado según Dios. (Efesios 4:24) Y                                        El hombre viejo, que está corrompido por los deseos engañosos de Satanás. (Efesios 4:22)

 

La Naturaleza Divina.---------------------La naturaleza satánica

                                               

Amor-----------------------------------------------Odio y rencor                                                          

Fe --------------------------------------Incredulidad, simulador  e hipócrita                                                               

Diligencia.----------------------------------Pereza, lento, haragán y ocioso                                                    

Verdad----------------------------------------------- Mentira y engaño                                                         

Honestidad.--------------------------Deshonesto, engañador y mentiroso

Cooperación.----------------------------------------- No comparte, es tacaño.                                               

Fidelidad.------------------------------------------Infiel y traicionero

Responsabilidad.----------------------------------Que no cumple promesas

Mansedumbre…………………………Iracunda, violenta e heridora

Empatìa.-----------------No se pone en el lugar de otro. Nada le importa.

Flexibilidad.-------------------------------Inflexible, terco irrazonable

Servicio.-----------------------------------Que no sirve, vago y perezoso

Misericordia.--------------------No se conduele de nadie, cruel y heridor.                                                    

Justicia.-----------------------------------------Injusto, engañador y ladrón

Santidad.----------------uno que le gusta más lo del mundo que lo de Dios

Paciencia------------------------------------------------Impaciente e iracundo

Paz.-------------------------------------------------------Guerra, odio y rencor

Tolerancia.---------------Intolerante, iracundo, heridor, jefe y manda más.

Generosidad.------------------No le gusta dar de lo suyo, tacaño y egoísta.

Amabilidad.-------------------------------------Ogro-gruñón e heridor.

Sensibilidad.---------------------------------------No ve la necesidad de otro.

Obediencia.------------------------------------Desobediente, rebelde y terco.

Sujeción.------------------------------------------------Rebelde a la autoridad.

Prudencia.-------------------------------------------------Imprudente.

Templanza.------------------------------------------------Que no es maduro.

Humildad.-------------------------------------------Orgulloso, altivo y terco.

Estabilidad.------------------Que no es estable en las decisiones que toma, cambia mucho de parecer.

Diligente----------------------------------Que haces las cosas a su tiempo.

 

Tenemos disponibles varios estudios proféticos y de la Sana Doctrina, que podemos enviarles gratis o dales conferencias.

 

El Anticristo será presidente de la Unión Europea.

El gobierno mundial.

El Nuevo Orden Mundial.

La masonería Iluminati: El gobierno invisible mundial.

Conozca las Profecías que faltan por cumplirse antes de la segunda venida visible de Jesucristo a Jerusalén.

La reconstrucción del Templo de Dios en Jerusalem.

Surgimiento de las dos bestias de Apoc. Capitulo 13.

El rapto de los hijos de Dios para recibir a Jesucristo en el aire.

El surgimiento de los dos testigos y profetas de Dios en Jerusalem.

El surgimiento y reinado del Anticristo.

El Anticristo que has de venir, será un joven judío, súper genio, ateo, humanista, no se casará y tendrá menos de 35 años, cuando se convierta en la bestia.

El Anticristo será el papa universal. El único líder religioso que habrá durante su gobierno mundial. Solo a Satanás, a él y a su imagen se adorará.

Imposición de la marca de la bestia.

Conozca el tiempo exacto cuando ocurrirá la gran tribulación mundial.

Conozca la descendencia del Anticristo y quienes lo pondrán a gobernar

La unicidad de Dios.

El verdadero bautismo.

La Sana Doctrina.

Tatuajes y marcas.

¿Por qué es un pecado mortal ponerse marca en el cuerpo?

¿Podrá un biochip ser la marca de la bestia?

¿Quiénes pasarán por la gran tribulación mundial?

La Cena del Señor. ¿Cuántas veces al año debe celebrarse?

El reinado de Jesucristo durante mil años, primeramente.

El Milenio, ¿Será en el cielo o en la tierra?

Conozca la pura verdad acerca del rapto.

Porque invocamos: OH Señor Jesús.

¿Conoce usted la verdadera Iglesia de Jesucristo?

La Iglesia de Jesucristo es dirigida por: ancianos y diáconos.

Y otros.

 

Para contacto: 829-801-9407-.

 

Escrito por: Inocencio Rodríguez. (El hermano Chencho)

 

Hermanochencho777@hotmail.com

 

http://iglesiaensantodomingonorte.es.tl/

 

Esta es la única página Web que enseña el cumplimiento de las Profecías, que faltan por cumplirse antes de la segunda venida visible de Jesucristo a Jerusalén y enseña y practica la verdadera Sana Doctrina, enseñada y practicada por Jesús y Sus Apóstoles.