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  PORQUE NO PODEMOS COBRAR EL DIEZMO
 
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PORQUE NO PODEMOS COBRAR EL DIEZMO

MINISTERIO PROFÉTICO: ABRIENDO LOS OJOS

Y conocerán la verdad y la verdad los hará libres de: mandamientos de hombres, de doctrinas de demonios, de falsos profetas, de falsas interpretaciones proféticas, de falsos cristos, de falsas enseñanzas y de las alteraciones, añadiduras y anulaciones, que la iglesia católica y sus aliados, le han hechos a muchos versículos de la Biblia, para justificar sus falsas creencias religiosas.

INSTRUDUCCIÓN: Corrigiendo lo deficiente. En Isaías 26.1-3, nos dice: Abrid las puertas, y entrará la gente justa, guardadoras de verdades. En Tito 1:5 nos dice: Por esta causa te deje en la Isla de Creta, para que corrija lo deficiente. De acuerdo a estos versículos, cada hijo de Dios, tiene que ser justo, guardador de verdades, y corregir lo deficiente. ¿Qué es lo deficiente en el área espiritual? Es la imposición de una creencia, o una practica religiosa creada por el hombre o proveniente de los demonios, pero enseñada como una doctrina bíblica.

A toda persona desde su infancia maternal y espiritual, le han hecho creer y practicar creencias religiosas antibiblicas. Por lo tanto, es un deber de todo hijo de Dios, corregir estas creencias y practicas antibiblicas. ¿Cómo corregimos una creencia o una practica religiosa antibiblica inventada por los hombres o por los demonios, pero enseñada como una doctrina cristiana? En segunda Timoteo 3:16-17) leemos: 16 Toda Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir, para instruir en justicia, 17a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, equipado para toda buena obra.

A fin de que el hombre de Dios sea perfecto. Para que un hijo de Dios llegue a la perfección, debe primero, examinar sus creencias y practicas con las que enseña la Biblia. Pues, las Escrituras, son verdades reveladas por Dios. Por lo tanto, todas las creencias y prácticas religiosas que nos han enseñado, tenemos que confrontarlas con las Escrituras. Y las que no armonizan con ellas, tenemos que corregirlas. Es decir, anularlas y aborrecerlas, para creer y practicar las que enseña la Biblia. Si hacemos eso, nos convertiremos en cristianos justos y guardadores de verdades. Corregir lo deficiente, es un mandamiento de Dios. Además, cuando corregimos lo deficiente, crecemos espiritualmente, y nos convertimos en cristianos justos, guardadores y propagadores de las verdades que proceden de Dios.

En cambio, si no examinamos nuestras creencias y nuestras prácticas religiosas con las Escrituras, estamos expuestos a ser cristianos injustos, guardadores y propagadores de falsas creencias y falsas interpretaciones proféticas, aunque erróneamente las enseñemos como verdades reveladas por Dios. Un verdadero cristiano siempre está presto para aceptar las correcciones que Dios le hace a través de su palabra. Un hijo de Dios es un depósito para guardar verdades espirituales que proceden de Dios. Por eso, cada día, debe examinar las creencias y las practicas religiosas que le han enseñado, para saber si proceden de Dios.

En este folleto, vamos a examinar el tema: Porque no podemos pagar el diezmo. ¿Cree usted que en este tiempo los cristianos debemos pagar el diezmo? ¿Cree que el diezmo está vigente? Este folleto tiene como única finalidad: demostrarle, por las Escrituras, la Ley del diezmo, como era aplicado, quienes estaban obligados a pagarlo, adonde debían llevarlo, quienes eran los únicos que podían cobrarlo, y porque el diezmo era obligatorio.

Porque no debemos pagar el diezmo. Jesús le dijo a Sus Discípulos: Mirad que no se dejen engañar, porque se levantarán falsos profetas y a muchos engañaran. (Mateo 24:5 y v.11) ¿Por qué vendrán los falsos profetas y engañarán a muchos? Porque ellos no conocen ni a un verdadero profeta de Dios, ni a un falso profeta. También, hay impostores maestros bíblicos y a muchos lo mantienen engañados, diciéndole que el diezmo está vigente y que hay que pagárselo para que Dios los bendigas y si no lo hacen, los tildan de ladrones y hasta le predicen maldiciones y calamidades que les vendrán
. Eso es un chantaje y un puro engaño.

Es bueno, que los hijos de Dios sepan, que el fundamento para edificar la Iglesia de Jesucristo hoy, no es el Viejo Testamento, sino el Nuevo Testamento. Pues, la mayoría de las Leyes que Dios le dio a Su Pueblo, Israel, para que las practicaran, no son aplicables en la Iglesia. Muchas Leyes fueron decretadas solo para que las practique el Pueblo de Israel. Una de ella es el diezmo. La Biblia nos enseña, que el Fundamento de los Apóstoles y los Profetas es la base para edificar la Iglesia de Jesucristo. (Efesios 2: 20 edificados sobre el fundamento de los Apóstoles y Profetas, siendo Cristo Jesús mismo la Piedra Angular.

Cuidémonos, de practicar lo que Dios no ha ordenado para Su Iglesia. Recordemos, toda práctica religiosa que Dios no haya ordenado para edificar Su Iglesia, es una doctrina de demonios, o es un mandamiento de hombre. ¿Podemos hoy cobrar el diezmo? ¿Está autorizado en el Nuevo Testamento que un anciano, o un pastor cobre el diezmo? ¿Las Iglesias establecidas por los Apóstoles cobraban el diezmo? ¿Pueden hoy, un pastor o un anciano, o un rabino cobrar el diezmo? ¿Existe en el Nuevo testamento un mandamiento ordenado por Jesús o por los Apóstoles ordenando el cobro del diezmo? Si Jesús no lo ordenó, ni los Apóstoles, ¿Quién autoriza a los pastores y las pastoras a cobrar el diezmo en este tiempo? Veamos:

Hoy, hay muchas iglesias evangélicas que cobran el diezmo, ¿Quién las autorizas a cobran el diezmo? ¿La Biblia? No hombre. En todo el N.T. no encontramos ni un solo versículo, que testifique que las Iglesias apostólicas cobraban el diezmo. También, cobran el diezmo, muchas iglesia mesiánicas, es decir, iglesias formadas por israelitas que han aceptado a Jesús como su Mesías y su Salvador. Pero si hacemos un minucioso estudio acerca de la Ley del diezmo, quienes tenían que pagar el diezmo, a quienes había que entregárselo, donde había que llevarlo, etc. Encontraremos, que el diezmo no está vigente hoy, ni para que lo paguen israelitas, ni lo cobren rabinos. Tampoco, no tienen que pagarlos los cristianos, ni cobrarlos los pastores y las pastoras. Lo que si está vigente para las Iglesias cristianas, desde el tiempo de los Apóstoles, es la recolecta de una ofrenda voluntaria cada domingo, para las necesidades de los hermanos. Esto lo veremos más adelante. Las iglesias evangélicas que hoy cobran el diezmo, los están haciendo ilegalmente. No tienen ninguna autorización de Dios. El cobrar el diezmo en este tiempo es un mandamiento de hombre. Por lo tanto, ningún hijo de Dios que cree el hablar de Dios a través de Jesús, el Espíritu Santo y Sus Apóstoles, no tiene que pagar el diezmo sino una ofrenda voluntaria, de acuerdo a como haya prosperado, para las necesidades de los hermanos. Esto lo veremos mas adelante.

Las iglesias que cobran el diezmo, les exigen a todos sus miembros que tienen que diezmar de la totalidad del dinero que ganen, para que puedan obtener bendiciones de parte de Dios. Y le dicen, que mientras mas den sus diezmos, más serán bendecidos. Y que sino diezman, son ladrones, y que Dios los va a castigar. Entonces, los hermanos para recibir bendiciones y no ser castigados por Dios, pagan sus diezmos de todo lo que ganan, aún haciendo sacrificios. Pues, no pagar sus diezmos, según sus pastores y pastoras, es caer en las manos de un Dios que no tendrá misericordia. Que será implacable, sino le pagan sus diezmos. Los pastores y pastoras le dicen: Dios te va a herir con plagas si no paga el diezmo. Y como los pobres hermanos no conocen la ley del diezmo, lleno de miedo, pagan el diezmo. ¿Cree usted que este es Dios, Jehová de los ejércitos, que hará tal cosa con los que no le pagan el diezmo? Creemos que no. Pero los impostores y desconocedores de la ley del diezmo, les meten miedos a sus miembros para que le paguen el diezmo.

Los cristianos que se congregan en las iglesias que cobran el diezmo, viven una vida llena de miedo y de temor a ser castigados por Dios si no diezman, según sus pastores y pastoras. Pero, ¿Enseña la Biblia tal cosa? Imposible. Dios no enseña tal cosa, ni hará tal cosa con sus hijos. Todo lo que Dios hace, lo hace por amor y todo lo que se va a hacer para Dios, tiene que hacerse en amor y voluntariamente. Cuando los hermanos oyen a su pastor o su pastora decir, Si no diezman serán castigados por Dios. Y si un hermano se enferma o tiene un accidente, le dicen: eso fue Dios que te castigó porque no diezmaste. Y de esta manera, los hermanos son obligados a pagar el diezmo de todo lo que ganan. Esa es la pura verdad que están viviendo los hermanos, en las iglesias que pertenecen a los con concilios evangélicos.

Justo es decir, que hay muchos pastores, que cobran el diezmo por desconocer la Ley del diezmo ordenada por Dios. Pero, hay muchos pastores y pastoras, que cobran el diezmo para aprovecharse de los hermanos y vivir a costa de ellos. Pero tanto a unos, como a los otros, Dios no lo ha mandado a cobrar el diezmo en este tiempo. Ellos mismos se han designado a cobrar el diezmo. Y esto es un sutil robo y una vil estafa en nombre de Dios. Pues, el cobro del diezmo tiene una meta: Unos, lo utilizan para su uso personal y vivir una vida de abundancia, y otros, lo usan para expandir su propio ministerio y sus propias iglesias. Estos son los verdaderos comerciantes del Evangelio. Estos son los Balaanes modernos, que por dinero venden sus conciencias al mejor postor y escandalizan la Obra de Dios, y enseñan mandamientos de hombres y doctrinas de demonios.

¿Qué nos enseña la Biblia con respecto a la Ley del diezmo? Todos los hijos de Dios, estamos obligados a creer y practicar solo lo que Dios ha ordenado para edificar Su Iglesia. Cualquier creencia o práctica religiosa que Dios no ha ordenado es, un mandamiento de hombre, o una doctrina de demonios. Todos hijos de Dios, tienes que saber, que el diezmo es una Ley que Dios la estableció en Su Pueblo, Israel, solamente para ellos. El diezmo no se estableció para los gentiles. El diezmo, no tenían que pagarlo todos los israelitas, solo pagaba el diezmo, el que tenía tierra y la cultivaba, el que criaba animales y el que criaba aves. Y solo tenia que pagar, el diez por ciento de las ganancias netas. Esto lo veremos mas adelante. Sin embargo, hoy las iglesias que cobrar el diezmo, obligan a cada miembro a pagar el diezmo, no importa si el miembro trabaja o no. Todo tienen que pagar el diezmo de la cantidad que ganan para no ser castigados por Dios, según los pastores y las pastoras que cobran el diezmo. Cobrarle el diezmo a cada miembro de todo lo que ganan es un engaño y una pura estafa.

¿Por qué y para qué Dios decretó la Ley del diezmo? Para no caer en los errores que han caído las iglesias que cobran el diezmo, es necesario conocer la Ley que Dios decretó con respecto al diezmo para los israelitas. A los cristianos que se congregan en las iglesias que cobran el diezmo, les han enseñado una enseñanza incorrecta con respecto al diezmo. Por un lado, les enseñan a los hermanos, que la Ley está abolida. Pero, ¿Cuál ley está abolida) Sin embargo, le cobran el diezmo de todo lo que ganan. Y nos preguntamos, si la Ley está abolida, y la ley contempla el cobro del diezmo para los israelitas que tenían tierra, animales y aves, ¿Por qué ellos cobrar hoy en diezmo? ¡Que contradicción más terrible!

Es en las Leyes escritas por Moisés que encontramos la Ley del diezmo. Por lo tanto, si ellas han sido abolidas como afirman las iglesias que cobran el diezmo, ¿Por qué les cobran el diezmo de todo lo que ganan a los hermanos? La única vez que la Biblia menciona el diezmo, es con referencia a la práctica de las Leyes escritas por Moisés. Por lo tanto, si una iglesia evangélica no practicas todas las Leyes que escribió Moisés, ¿Por qué tiene que practicar la Ley del diezmo? ¿Por qué las iglesias que cobran el diezmo practican la Ley del diezmo y no las demás Leyes? El Apóstol Pablo nos dice, que si practicamos una Ley, estamos obligados a cumplir todas las Leyes. Es decir, todos los requisitos que dice esa Ley. (Gálatas 5:2-3) Así que, si una iglesia cobra el diezmo, está obligada a cumplir todo lo que dice la Ley del diezmo. Sin embargo, ellas solo cumplen una parte de esta Ley. Claro, la que le conviene. Son unos negociantes.

En fin, ¿Qué enseña la Ley del diezmo? ¿Para quién se decreto la Ley del diezmo? ¿Quiénes estaban autorizados por Dios para cobrar el diezmo. Entendámoslo, diezmar es para los israelitas que tenían tierra, animales y aves. El diezmo, fue una Ley que Dios estableció en Israel. El diezmo fue establecido para llevarlo a Jerusalén y para que se lo entregarán solo a los levitas en el Templo. Así lo estableció Dios en la Ley del diezmo. Solo los levitas que ejercía el sacerdocio levítico, estaban autorizados a recibir el diezmo en el Templo. Ningún israelita podía llevar sus diezmos a otro lugar que no fuera a Jerusalén, en el Templo. El diezmo, no se le entregaba a un levita, sino a los sacerdotes que ejercía el sacerdocio. Ahora, cabe preguntarnos, si hoy no existe el Templo, ni el sacerdocio levítico, ¿Dónde tenemos que llevar el diezmo? Si el diezmo, había que llevarlo solo a Jerusalén y entregárselo a los levitas, ¿Por qué hay tantas iglesias que cobran el diezmo, sin ser el sacerdocio levítico? Si hoy no existe el Templo, ni el sacerdocio levítico, ¿Por qué hay tantas iglesias que cobran el diezmo? ¿Qué nos enseña Dios con respecto al diezmo y a donde había que llevarlo y a quien había que entregárselo?
Observe lo que Dios dice: “Sino que el lugar que Jehová, vuestro Dios, escoja entre todas vuestras tribus, para poner allí Su Nombre y habitar en él, ese buscaréis, y allá iréis. 6 Allí llevaréis vuestros holocaustos, vuestros sacrificios, vuestros diezmos y la ofrenda reservada de vuestras manos, vuestros votos, vuestras ofrendas voluntarias y las primicias de vuestras vacas y de vuestras ovejas; 7 allí comerán delante de Jehová, vuestro Dios, y se alegrarán, vosotros y vuestras familias, de toda obra de vuestras manos en que Jehová, Tu Dios, te haya bendecido. 8 »No harán como todo lo que hacemos nosotros aquí ahora, cada uno lo que bien le parece, 9 porque hasta ahora no han entrado al reposo y a la heredad que os da Jehová, vuestro Dios. 10 Pero pasarán el Jordán y habitarán en la tierra que Jehová, vuestro Dios, os hace heredar. Él os hará descansar de todos vuestros enemigos de alrededor, y habitarán seguros. 11 Y al lugar que Jehová, vuestro Dios, escoja para poner en él Su Nombre, allí llevarán todas las cosas que yo os mando: vuestros holocaustos, vuestros sacrificios, vuestros diezmos, las ofrendas reservadas de vuestras manos, y todo lo escogido de los votos que haya prometido a Jehová. 12 Y se alegrarán delante de Jehová, vuestro Dios, vosotros, vuestros hijos, vuestras hijas, vuestros siervos y vuestras siervas, así como el levita que habite en vuestras poblaciones, por cuanto no tiene parte ni heredad con vosotros. 13 »Cuídate de no ofrecer tus holocaustos en cualquier lugar que veas; 14 sólo en el lugar que Jehová escoja en una de tus tribus ofrecerás tus holocaustos, y allí harás todo lo que yo te mando. (Deut.12:5-13)

»Cuídate de no ofrecer tus holocaustos en cualquier lugar que veas; sólo en el lugar que Jehová escoja en una de tus tribus ofrecerás tus holocaustos, y allí harás todo lo que yo te mando. ¿Qué ciudad escogió Dios para habitar Su Nombre? Dios eligió a Jerusalén. “Roboam hijo de Salomón reinó en Judá. De cuarenta y un años era Roboam cuando comenzó a reinar; diecisiete años reinó en Jerusalén, ciudad que Jehová eligió entre todas las tribus de Israel para poner allí Su Nombre. (1 Reyes 14:21)

¿Qué tribu eligió Dios para que le entreguen los diezmos? Dios eligió a la tribu de Leví. “El Señor le dijo a Aarón: "Tú no tendrás tierra ni propiedades en Israel, como los demás israelitas. Yo seré tu propiedad y tu herencia en Israel. A los levitas les doy como propiedad esa décima parte que los israelitas deben entregar de sus productos, en pago del servicio que prestan en el Tabernáculo de reunión. (Números 18:20-21) Solo a esta tribu había que entregarle los diezmos. Entonces, ¿Por qué hay muchas iglesias que cobran el diezmo si no son la tribu de Leví? ¿Ve usted el sutil engaño?

Por eso, no debemos pagar el diezmo a nadie en este tiempo. Los israelitas, tampoco tienen que pagar el diezmo a nadie. Porque Dios ordenó la Ley del diezmo para los levitas. Y hoy, el sacerdocio levita, ni el Templo existen. Cuando el Templo fue destruido en el año 70 de nuestra era por lo romanos, ahí mismo terminó el sacerdocio levítico. Si un israelita quisiera diezmar hoy, ¿A dónde llevará el diezmo si el Templo no existe, ni tampoco el sacerdocio levítico? Por lo tanto, todo el que cobre el diezmo hoy, sea un pastor, una pastora o un rabino, es un impostor. Esta engañando y mintiéndole a los hermanos.

¿Por qué tenemos que practicar lo que Dios no ha ordenado para la Iglesia? ¿Por qué nos resistimos a practicar lo que sí Dios ha ordenado, con respecto a la ofrenda cada domingo? Si Dios ordenó una ofrenda cada domingo, ¿Por qué tenemos que decirle a Dios: No es una ofrenda cada domingo, sino el diezmo? ¿Quién dirige a un pastor o una pastora a cambiar un mandamiento que Dios dio a través de Su Apóstoles? Su ceguera espiritual es tan grave, que no le deja ver, que están enfrentando a Dios. Que están anulando el mandamiento que Dios dio para las Iglesias. Dios, a través del Apóstol Pablo dijo: “Como ordené en todas las Iglesias de Galasias, así hágalo ustedes también, cada domingo, recolecten una ofrenda” Esté es el mandamiento que las Iglesias de Jesucristo tienen que cumplir.

Ahora, empecemos a analizar, la Ley del diezmo, como era aplicada esta Ley, a quien se le aplicaba, quienes tenían que pagar el diezmo. ¿Qué significa la palabra diezmo en hebreo? La palabra “Maaser” significa: diezmo. Ella proviene del verbo “leaser”, que significa diezmar, es decir, separar el diez por ciento. Una décima parte está formada añadiendo la letra “mem” o el prefijo “m” a “eser” que es el género femenino cardinal para el número “diez”. Así tenemos la palabra “Ma-ASaR”, que quiere decir, “desde el décimo”. El diezmo se pagaba en Israel a los levitas a partir de la décima parte de la ganancia. O sea, si tú trabajaba la tierra de una persona, y te producía 50 sacos de trigos. Tu no pagaba el diezmo de los 50 sacos de trigo. Tu pagaba el diezmo de la ganancia que te tocaban de los 50 sacos de trigo. Si a ti te tocaban diez sacos de trigos, tú restaba todos tus gastos y de lo que te quedaba limpio, eso era tu ganancia, y de esa ganancia tú pagaba la décima parte de diezmo.

Se pagaba el diezmo del neto y no del bruto. Las iglesias que le cobran el diezmo a sus miembros de todo lo que ganan, los están engañando y robándoles su dinero. El diezmo es una décima parte de tu ganancia y no del total de lo que tú gana. Es decir, cada israelita que cultivaba la tierra, criaba animales y aves, tenía que pagar una décima parte del neto y no del bruto. ¿Qué significa esto? Significa, que si usted gana 5.000 pesos, ese es el bruto. Su ganancia bruta. Si de esos 5.000 pesos, usted gastó en alimentos y abrigos 4.000 pesos. Solo le quedaron 1.000 pesos, ese es el neto. Entonces, usted solo tendría que pagar el diezmo de los 1.000 pesos que le quedaron.

Observe, otro ejemplo: Si usted tiene un vehículo de trabajo, y antes de comenzar a trabajar le echa 1.000 pesos de gasolina, y recolecta 1.500 pesos, ¿Cuánto se ganó? Se ganó 500 pesos. Correcto. Entonces, si usted tendría que pagar el diezmo, lo pagaría solo de los 500 pesos que se ganó. Por lo tanto, si usted paga diezmo de toda la cantidad que gana, a usted le están robando dos veces. Primero, porque en este tiempo no se debe pagar ningún diezmo. Segundo, porque si usted paga diezmo de la cantidad total que gana, le están cobrando dinero de más. Un diezmo, es la décima parte del neto, y nunca una décima parte del bruto.

¿Sabía usted que el gobierno americano le cobra el diezmo a cada americano? Si un americano se gano durante el año 20.000 dólares, ¿Le cobrará el gobierno el diez por ciento de los 20.000 dólares? No hombre. El gobierno solo le cobra el diez por ciento de lo que realmente él se gano. Después que una persona a restado sus gastos durante el año, de lo que le queda, de eso pagará al gobierno el diez por ciento.

El diezmo lo pagaban los que tenían tierra y la cultivaban, de los que criaban animales y aves. El diezmo se pagaba de lo que producía la tierra, los que tenían animales y aves. Por lo tanto, Si un israelita no tenía tierra, ni animales, ni aves, no tenía que pagar diezmo. “Indefectiblemente diezmarás del producto del grano que rinda tu campo cada año”. (Deut. 14:22) ¿Observó usted esa expresión? Cada año. Sin embargo, las iglesias que cobran el diezmo lo cobran cada mes y cada 15 días. ¿No es un gran engaño?

El diezmo no es una ofrenda. El diezmo era obligatorio para los israelitas que tenían tierra, para los que criaban animales y aves. Mientras, que una ofrenda, es algo que tú da voluntariamente cada domingo. Dios, a través del Apóstol Pablo ordenó, que cada domingo se traiga a la Iglesia una ofrenda y no el diezmo. El diezmo era cada año y la ofrenda es cada domingo.

El diezmo en los días de Moisés. ¿Cómo se aplicaba el diezmo? Veamos: “El diezmo de la tierra, tanto de la simiente de la tierra como del fruto de los árboles, es de Jehová: es cosa dedicada a Jehová. 31 Si alguien quiere rescatar algo del diezmo, añadirá la quinta parte de su precio por ello. 32 Todo diezmo de vacas o de ovejas, de todo lo que pasa bajo la vara, el diezmo será consagrado a Jehová” 34 Estos son los mandamientos que ordenó Jehová a Moisés para los hijos de Israel en el monte Sinaí. (Levítico 27:30-34) Notemos, que nos dice: “Estos son los mandamientos que ordenó Jehová a Moisés para los hijos de Israel en el monte Sinaí”. Si la Ley del Diezmo fue solo para los hijos de Israel, ¿Por qué hoy hay tantas iglesias gentiles que cobran el diezmo? Los gentiles no tenían que pagar diezmo en Israel. La Ley del diezmo era solo para los Israelitas.

Así que, los únicos que tenían que pagar la décima parte de lo que su tierra producía eran los israelitas. El que no tenía tierra, ni criaba animales, ni aves, no tenia que pagar diezmo. El jornalero no pagaba diezmo. Como veremos más adelante. Sin embargo, las iglesias que cobran el diezmo, se lo cobran a los que trabajan y a los que no trabajan, cada mes. Otro engaño.

Requisitos de la Ley del diezmo: “Estas son las leyes y los decretos que ustedes deberán poner en práctica durante toda su vida, en la tierra que el Señor y Dios de sus antepasados les va a dar en posesión. 2 "Destruyan por completo todos los lugares donde los pueblos que van a conquistar adoran a sus dioses: en los montes, en las colinas y bajo los árboles frondosos. 3 Derriben sus altares, hagan pedazos las piedras y quemen los troncos a los que rinden culto, y destruyan las imágenes de sus dioses; borren de aquellos lugares su recuerdo. 4 "Al Señor su Dios no deben adorarlo de esa manera. 5 Entre las tribus de ustedes, el Señor escogerá un lugar como residencia de Su Nombre, y a ese lugar podrán ustedes ir a adorarlo. 6 Allí sacrificarán y quemarán animales en su honor, y le llevarán sus diezmos, contribuciones, promesas y ofrendas voluntarias, así como las primeras crías de sus vacas y ovejas. 7 Comerán allí, delante del Señor, Su Dios, y en compañía de sus familias se alegrarán del fruto de su trabajo con que el Señor, Su Dios los haya bendecido. 8 "Allí no deberán hacer ustedes lo que ahora hacemos aquí, donde cada uno de nosotros hace lo que mejor le parece. 9 Realmente todavía no han llegado ustedes al lugar tranquilo que el Señor su Dios les va a dar en posesión. 10 Pero una vez que hayan cruzado el Jordán y vivan en el país que él les va a entregar, y ya estén libres de todos los enemigos que los rodean, y sin ningún temor, 11 entonces, en el lugar que el Señor su Dios escoja como residencia de Su Nombre, le ofrecerán ustedes todo lo que les he ordenado: animales sacrificados y quemados en su honor, diezmos, contribuciones y todo lo más escogido de las promesas que le hayan hecho al Señor. 12 Y harán fiesta en presencia del Señor su Dios, junto con sus hijos y sus siervos, y con los levitas que vivan entre ustedes, ya que ellos no han recibido entre ustedes ninguna tierra en propiedad. 13 "Cuídense de no quemar animales al Señor en cualquier lugar que encuentren; 14 únicamente podrán hacerlo en el lugar que el Señor su Dios escoja en una de sus tribus. Allí cumplirán todo lo que les he ordenado. 15 "Sin embargo, podrán matar y comer carne en sus poblaciones en cualquier momento, según los bienes que el Señor su Dios les haya dado. La podrán comer todos ustedes, estén o no ritualmente puros, como si fuera carne de gacela o de ciervo. 16 Pero la sangre no deben comerla, sino derramarla en la tierra como agua. 17 "No podrán ustedes comer dentro de su ciudad el diezmo de su trigo, de su vino o de su aceite, ni las primeras crías de sus vacas y ovejas, ni nada de lo que hayan prometido al Señor, ni de sus ofrendas voluntarias. 18 Solo podrán hacerlo delante del Señor su Dios, en el lugar que Él escoja; allí, en presencia del Señor su Dios y en compañía de sus hijos y sus criados, y de los levitas que vivan entre ustedes, se alegrarán del fruto de su trabajo. 19 Mientras ustedes vivan en el país, no abandonen jamás a los levitas. (Deut. 12:1-19) ¿Ve por qué no debemos pagar el diezmo en este tiempo?

Según estos versículos: el diezmo se llevaría a Jerusalén, y se le entregaría en el Templo a los levitas. Por lo tanto, toda iglesia que cobra el diezmo en nombre de Dios, está usurpando el ministerio levítico y le está robando a Dios. Dios ordenó que el diezmo se lo entregaran a los levitas en el Templo. Entonces, ¿Qué hace una iglesia cobrando el diezmo si ser el sacerdocio levítico? ¿Desde cuando Dios substituyó el sacerdocio levítico por una iglesia evangélica? Dios es fiel, y no cambia Sus Promesas ni Sus mandamientos.

Se pagaban dos diezmos: “Realmente, se pagaban dos diezmos, que estaban ligados al ciclo de siete años de la tierra. El primer diezmo, “Maserot”, se pagaba cada año para el sostén de los levitas. Sostenimiento de los sacerdotes y los levitas. 8 El Señor le dijo a Aarón: "Yo he puesto bajo tu cuidado las ofrendas que se me hacen. Todas las ofrendas sagradas que los israelitas me hacen, te las doy a ti y a tus hijos como la parte que les corresponde; esta será una norma para siempre. 9 De los sacrificios que se queman, te tocarán a ti todas las ofrendas de cereales y los sacrificios que por el pecado o por la culpa me ofrezcan los israelitas; todas estas ofrendas sagradas serán para ti y para tus hijos. 10 Todo varón de entre ustedes podrá comer de estas ofrendas, pero habrá de comerlas en un lugar consagrado, pues son sagradas.

11 "También te doy a ti, y a tus hijos e hijas que aún vivan contigo, las ofrendas especiales que los israelitas me presenten. Esta será una ley permanente. Cualquier persona de tu familia que esté ritualmente pura, podrá comerlas. 12 También te doy los primeros frutos que los israelitas me traen cada año: lo mejor del aceite, lo mejor del vino y del trigo. 13 Igualmente los primeros frutos de las cosechas que ellos me ofrecen, serán para ti. Cualquier persona de tu familia que esté ritualmente pura, podrá comerlos. 14 Toda ofrenda que los israelitas me consagren, será para ti.

15 "Todos los primeros hijos de los israelitas o las primeras crías de los animales, que me ofrecen, serán para ti. Pero en el caso de los primeros hijos de los hombres y de las primeras crías de los animales impuros, pedirás un rescate a cambio. 16 El rescate deberá pagarse un mes después del nacimiento, y será de cinco monedas de plata, según la moneda oficial del santuario, que pesa once gramos. 17 Pero no permitirás que sean rescatadas las primeras crías de las vacas, las ovejas o las cabras. Esas están reservadas para mí, y tendrás que matarlas; su sangre la derramarás sobre el altar, y su grasa la quemarás como ofrenda de olor agradable para Mí. 18 Tú podrás quedarte con la carne, lo mismo que con el pecho del animal, que es la ofrenda especial, y con el muslo derecho. 19 Todas las contribuciones que los israelitas aparten para Mí, te las doy a ti, y a tus hijos e hijas que aún vivan contigo. Esta es una ley permanente. Es una alianza invariable, eterna, que yo hago contigo y con tus descendientes." 20 El Señor le dijo a Aarón: "Tú no tendrás tierra ni propiedades en Israel, como los demás israelitas. Yo seré tu propiedad y tu herencia en Israel. 21 A los levitas les doy como propiedad esa décima parte que los israelitas deben entregar de sus productos, en pago del servicio que prestan en la tienda del encuentro. 22 Los demás israelitas no deberán acercarse a la tienda del encuentro, porque cometerían un pecado que les traería la muerte. 23 Los levitas serán los únicos que se ocuparán del servicio de la tienda del encuentro, y serán responsables de las faltas que cometan. Esta será una ley permanente, que pasará de padres a hijos. Los levitas no tendrán territorio propio en Israel. 24 A ellos les he dado en propiedad la décima parte que los israelitas deben ofrecerme de sus productos. Por eso les he dicho que no tendrán territorio propio en Israel." (Números 18:8-24)

El diezmo de los diezmos. Los israelitas tenían que pagar el diezmo, de los diezmos que recibían de los israelitas. Números 18:25 El Señor le ordenó a Moisés Números 18:26 que les dijera a los levitas: «Cuando recibáis de los israelitas los diezmos que os he dado a vosotros como herencia, ofrecedme, como contribución, el diezmo de esos diezmos. Números 18:27 La contribución que vosotros me presentéis os será contada como si fuera trigo de la era o mosto del lagar. Números 18:28 Así que reservaréis para mí, como su contribución, el diezmo de todos los diezmos que recibáis de los israelitas, y se lo entregaréis al sacerdote Aarón. Números 18:29 De todos los dones que recibáis, reservaréis para mí una contribución. Y me consagraréis lo mejor. Números 18:30 »Cuando me hayáis presentado la mejor parte, se os tomará en cuenta como si fuera vino o grano. Números 18:31 Lo que sobre, vosotros y vuestras familias podréis comerlo donde queráis. Ése será el pago por vuestro ministerio en la Tienda de reunión.

El segundo diezmo: “Maaser sheni”, se convertirá en dinero y se usará para hacer peregrinación personal a Jerusalén. El “peregrino” podía gastar este dinero como él quisiera en la peregrinación, pero se esperaba de él que proveyera para el levita también cuando llegara, y cualquier remanente se le daba a los levitas.

Instrucciones acerca del diezmo. 22 "Cada año, sin falta, deberán ustedes apartar la décima parte de todo el grano que cosechen. 23 De esa décima parte de trigo, de vino y de aceite, y de las primeras crías de sus vacas y ovejas, comerán ustedes delante del Señor su Dios, en el lugar que Él escoja como residencia de Su Nombre, para que aprendan a reverenciar siempre al Señor. 24 Y si el Señor los bendice, pero ustedes tienen que hacer un largo viaje para llevar esa décima parte por vivir muy lejos del lugar que el Señor ha escogido para poner allí Su Nombre, 25 entonces venderán ustedes esa décima parte y el dinero de la venta lo llevarán al lugar que el Señor haya escogido. 26 Con ese dinero comprarán allí lo que crean más conveniente: bueyes, ovejas, vino o cualquier bebida fermentada; en fin, lo que ustedes quieran, y lo comerán allí, delante del Señor su Dios, y harán fiesta junto con su familia. 27 "No desamparen nunca a los levitas que vivan en su población, ya que a ellos no les ha tocado tener su propia tierra como a ustedes. 28 "Cada tres años deberán ustedes apartar la décima parte de su cosecha del año, y almacenarla en su ciudad, 29 para que cuando vengan los levitas, a quienes no les ha tocado tener su propia tierra, o los extranjeros que viven entre ustedes, o los huérfanos y las viudas, puedan comer hasta quedar satisfechos. Así el Señor su Dios los bendecirá en todo lo que hagan. (Deut. 14:22-27)

Cada tercer año, sin embargo, el que diezmaba se quedaba en su casa y usaba este segundo diezmo para alimentar a los necesitados y a los levitas locales. 28 "Cada tres años deberán ustedes apartar la décima parte de su cosecha del año, y almacenarla en su ciudad, 29 para que cuando vengan los levitas, a quienes no les ha tocado tener su propia tierra, o los extranjeros que viven entre ustedes, o los huérfanos y las viudas, puedan comer hasta quedar satisfechos. Así el Señor su Dios los bendecirá en todo lo que hagan. (Deut. 14.28-29) Solo el primer diezmo se pagaba de cualquier cosecha y de otros productos no plantados. El primer diezmo solo se podía convertir en dinero por medio de pagar una penalidad de 20%. “30 "La décima parte de los productos de la tierra, tanto de semillas como de árboles frutales, pertenece al Señor y está consagrada a Èl. 31 Si alguien quiere recuperar algo de esa décima parte, tendrá que pagar lo que valga, más una quinta parte”. (Levítico 27: 30-31) sin embargo, el segundo diezmo se convertía en dinero como cuestión de hecho “Entonces venderán ustedes esa décima parte y el dinero de la venta lo llevarán al lugar que el Señor haya escogido. 26 Con ese dinero comprarán allí lo que crean más conveniente: bueyes, ovejas, vino o cualquier bebida fermentada; en fin, lo que ustedes quieran, y lo comerán allí, delante del Señor su Dios, y harán fiesta junto con su familia. (Deut. 14:25-26)

Los levitas tenían múltiples funciones. ¿Por qué los levitas recibían el diezmo? Esto era así, para que los levitas pudieran dedicarse al estudio de la Ley a tiempo completo. “Después Ezequías repartió a los sacerdotes y levitas por turnos, para que unos y otros, cada uno según su propio oficio, ofrecieran holocaustos y sacrificios de reconciliación, dieran gracias y alabaran al Señor, y sirvieran en las puertas del Templo. 3 Además el rey contribuyó de sus propios bienes para el holocausto de la mañana y de la tarde, para los holocaustos del sábado, de la fiesta de luna nueva y de las fiestas solemnes, como está escrito en la ley del Señor. 4 También ordenó a la gente que vivía en Jerusalén que entregaran a los sacerdotes y levitas la contribución que les correspondía, para que pudieran dedicarse con todo empeño a cumplir la ley del Señor. 5 Y cuando la orden se difundió, los israelitas dieron con gran generosidad lo mejor de su cosecha de trigo, vino, aceite, miel y toda clase de productos del campo. También llevaron la décima parte de todos sus productos, en gran cantidad. (Segunda Crónicas 31:1-5) (Ezequiel 44: 23-24) "Los sacerdotes deben enseñar a Mi Pueblo a distinguir entre lo santo y lo profano, y entre lo puro y lo impuro. 24 En los pleitos, ellos actuarán como jueces, y juzgarán según Mis leyes. Cumplirán todas Mis leyes y enseñanzas acerca de todas Mis fiestas, y respetarán como días sagrados Mis sábados.

Los levitas tenían un ministerio: Primero, aceptar los diezmos que los israelitas les traían al Templo. Segundo, hacerle sacrificios a Dios. Y tercero, estudiar la Ley para enseñársela al Pueblo. "Yo seré la única posesión que reciban los sacerdotes como herencia. No se les dará ninguna propiedad en Israel. Yo soy su propiedad. 29 Podrán comer los cereales que los israelitas me ofrecen, y los animales de los sacrificios por el pecado y por la culpa. Igualmente, todo lo que los israelitas me consagren será para ellos. 30 Los sacerdotes recibirán también lo mejor de las primeras cosechas y de todas las ofrendas. Y cuando ustedes preparen la masa para el pan, lo mejor se lo darán a ellos. Así mi bendición descansará sobre las casas de ustedes. (Ezequiel 44:28-30)

Conclusión: Dios instituyó el diezmo para los levitas. Los israelitas tenían que traer este diezmo al Templo, en Jerusalén, cada año, que era el único lugar que los levitas ejercían el sacerdocio. El Templo y el sacerdocio levítico fueron destruidos en el año 70 de nuestra era. Por lo tanto, sea un israelita mesiánico, o un pastor evangélico que hoy cobre el diezmo, es ilegal. Tales personas están aplicándose un ministerio que no le corresponde.

Lo que enseñaron los Apóstoles. Ahora bien, ¿Qué enseñaron los Apóstoles y los Profetas en las Iglesias que establecieron con respecto al cobro del diezmo? Nada, absolutamente nada. En el Nuevo Testamento, no encontramos ni un solo versículo, que afirme que los Apóstoles y los Profetas les ordenaron a las Iglesias el cobro del diezmo. Entonces, si los Apóstoles y los profetas, no cobraban el diezmo, ni lo ordenaron que se hiciera, ¿Por qué hoy hay muchas iglesias que cobran el diezmo? ¿Siguen ellos el ejemplo de los Apóstoles? No hombre. El cobrar el diezmo en este tiempo, es un mandamiento de hombre y para el beneficio del mismo hombre.

No practique lo que Dios no ha ordenado que se haga. Si tú practica algo que Dios no ha ordenado, está pecando contra Dios. Tú debes practicar solo lo que Él has ordenado. Y Dios ordenó a través de Su Apóstol Pablo, que cada domingo de una ofrenda. ¿A quién tenemos que obedecer? Dios dice: Una ofrenda cada domingo. Y los hombres desobedientes dicen: No es una ofrenda cada domingo, si no el diezmo. Juzgue usted mismo a quien tenemos que obedecer.

Es bueno que sepamos, que en el tiempo de los Apóstoles, los israelitas llevaban el diezmo al Templo. Y los hermanos, llevaban sus ofrendas voluntarias el primer día de la semana. Fue el mismo Dios que ordenó el diezmo para los israelitas, y para las Iglesias locales una ofrenda voluntaria cada primer día de la semana. El mandamiento que Dios les dio a las Iglesias, a través del Apóstol Pablo, con respecto a la ofrenda para satisfacer las necesidades de los hermanos. A las Iglesias locales, se le dio un mandamiento, para que los hermanos den una ofrenda voluntaria semanal, de acuerdo a como hayan prosperado, y se lo haya propuesto en su corazón. He aquí los mandamientos para que los hermanos den una ofrenda semanal:

“En cuanto a la colecta para los santos, háganla según las instrucciones que di a las Iglesias en la provincia de Galacia. 2 Los domingos, cada uno de ustedes debe apartar algo, según lo que haya ganado, y guardarlo para que cuando yo llegue no se tengan que hacer colectas. (Primera Corintios 16:1-2)

Exhortación a la generosidad. 6 Pero esto digo: El que siembra escasamente, también segará escasamente; y el que siembra generosamente, generosamente también segará. 7 Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza ni por obligación, porque Dios ama al dador alegre. 8 Y poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda gracia, a fin de que, teniendo siempre en todas las cosas todo lo necesario, abundéis para toda buena obra; 9 como está escrito: «Repartió, dio a los pobres, su justicia permanece para siempre». 10 Y el que da semilla al que siembra y pan al que come, proveerá y multiplicará vuestra sementera y aumentará los frutos de vuestra justicia, 11 para que seáis ricos en todo para toda generosidad, la cual produce, por medio de nosotros, acción de gracias a Dios, 12 porque la entrega de este servicio no solamente suple lo que a los santos falta, sino que también abunda en muchas acciones de gracias a Dios. 13 Ellos, por la experiencia de este servicio glorifican a Dios por la obediencia que profesáis al evangelio de Cristo, y por la generosidad de vuestra contribución para ellos y para todos. 14 De igual modo, en su oración a favor de vosotros, os aman a causa de la superabundante gracia de Dios en vosotros. 15 ¡Gracias a Dios por su don inefable! (segunda Corintios 9: 6-15) A las Iglesias, en todo el N.T. se le ordenó dar una ofrenda cada domingo. El dar una ofrenda es un servio que se hace para Dios. Dios por medio de este servicio, suple las necesidades de los hermanos. Sin embargo, los hermanos que pertenecen a las iglesias que cobran el diezmo, no se benefician del diezmo que pagan. Pues, el diezmo que las iglesias cobran, tienen que enviárselos a sus respectivos Concilios.

Los dos ministerios. El ministerio de la Ley y el Ministerio de la Gracia. En Juan 1:17 leemos: “La Ley por medio de Moisés fue dada, pero la Gracia y la Verdad vinieron por medio de Jesucristo” Aquí están los dos Ministerios: Uno para los israelitas y el otro para los gentiles, las Iglesias. Para suplir las necesidades de los Levitas Dios estableció el diezmo. Y para las necesidades de los hermanos Dios estableció una ofrenda cada domingo según el hermano haya prosperado. Ni más ni menos.

¿Puedes ver la diferencia entre el diezmo y la ofrenda? El diezmo, era obligatorio para los israelitas. Los únicos que estaban autorizados para recibir los diezmos eran los levitas. El diezmo había que llevarlo a Jerusalén, al Templo. Mientras, que la ofrenda, era voluntaria y había que darla cada domingo en cada Iglesia. Estos ministerios son totalmente diferentes. Uno era para suplir las necesidades de los levitas, y el otro era para suplir las necesidades de las Iglesias locales. Por lo tanto, el mandamiento que Dios ordenó por medio del Apóstol Pablo fue, que cada domingo se recolecte una ofrenda para las necesidades de los hermanos. Este es el ejemplo que tenemos que seguir y obedecer. Recordemos, la Iglesia de Jesucristo edifica solo sobre el Fundamento o Enseñanza de los Apóstoles y los Profetas (Efesios 2:20)

Escrito por el hermano INOCENCIO TEJADA 27-1-2001

Hermanochencho777@hotmail.Com

LA IGLESIA DE JESUCRISTO EN SANTO DOMINGO NORTE
APARTADO POSTAL B-250 SANTO DOMINGO, DISTRITO NACIONAL, R. D. MOVIL 829-801-9407.

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