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  EL ESPÍRITU HUMANO
 


EL ESPÍRITU HUMANO
 
Ministerio profético. Abriendo los ojos
 
Cada ser humano tiene un espíritu creado por Dios
                                                                        
Es muy importante que los creyentes sepan que tienen un espíritu humano. Más adelante veremos que toda comunicación entre Dios y el hombre se produce en el espíritu que hay en el hombre. Si un creyente no sabe que tiene un espíritu, no sabrá cómo tener comunión con Dios en su espíritu, y sustituirá la obra del espíritu por actividades del alma, como por ejemplo, las de la mente y la parte emotiva. Como resultado, actuará la mayoría de veces conforme a su mente y no según la guiaza del Espíritu Santo a través de su espíritu. Ahora, analicemos los versículos que afirman que en el hombre hay un espíritu humano creado por Dios, para Dios poder comunicarse con el hombre y para que él lo adore:
 
Nota: la Biblia hace la diferencia entre el Espíritu de Dios y el espíritu humano que hay en cada persona: en Romanos 8:16 vemos, que el Espíritu de Dios está escrito en letra mayúscula y el espíritu humano está escrito con letra minúscula. “el Espíritu da testimonio a nuestro espíritu”. Por lo tanto, cada vez que veamos la palabra Espíritu con letra mayúscula se refiere al Espíritu de Dios y cuando veamos espíritu escrito con letra minúscula se refiere al espíritu humano que hay en el hombre.
 
En Génesis 2: 7, nos habla, de que Dios soplo en el hombre aliento de vida. Este aliento de vida, se convirtió en la vida del cuerpo y en el espíritu humano.
 
Zacarías 12:1 dice: “Jehová, que extiende los cielos y funda la tierra, y forma el espíritu del hombre dentro de él”.
 
Job 32:8 dice: “Ciertamente espíritu hay en el hombre, y el Espíritu del Omnipotente le hace que entienda”.
 
En Corintios 2:11 se habla del espíritu del hombre que está en él.
En 1 Corintios 5:4 se hace referencia a “mi espíritu”.
Romanos 8:16 habla de “nuestro espíritu”.
En 1 Corintios 14:14 de nuevo menciona “mi espíritu”.
Proverbios 25:28 menciona “el espíritu del hombre”.
Hebreos 12:23 menciona “los espíritus de los juntos”.
 
Estos versículos demuestran que el hombre tiene un espíritu, el cual no es el Espíritu Santo. Por medio de éste espíritu nosotros adoramos a Dios. En Juan 4:24 dice: “Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren”. Por lo tanto, la adoración a Dios es por medio de nuestro espíritu. Para Dios hablarnos es por nuestro espíritu. Para Dios reprendernos es por nuestro espíritu. Para Dios guiarnos es por nuestro espíritu.
 
EL NUEVO NACIMIETO. Nacimos de nuevo en el espíritu. La Vida Divina la recibimos en nuestro espíritu. Una vez que esa Vida Divina se une con nuestro espíritu, llegamos a ser engendrado por Dios. Pues, el Espíritu engendra espíritu. (Juan 3:3-5) nos dice, que lo que es nacido del Espíritu espíritu es. Pablo nos dice, que el que se une con el Señor, un espíritu es con Él (1 Cor. 6:16-17). Así que, la unión espiritual entre Dios y el hombre es por el espíritu humano. Todo lo que Dios realiza a través del hombre, es por medio de su espíritu.
 
El espíritu humano está compuesto de tres partes: De acuerdo con lo que enseña la Biblia y según la experiencia del creyente, se puede decir que el espíritu humano está compuesto de tres partes: conciencia, comunión e intuición. El ser humano consta de tres partes. Cabeza, tronco y extremidades. Todas estas cosas están compuestas de tres partes. La Escritura también revela tres partes en el Tabernáculo (el atrio, el lugar Santo y el lugar Santísimo). El número tres es la figura o número básico. El Arca de Noé tenía tres niveles. Esto significa que el número tres es una unidad completa. Son tres pero se cuenta como uno. Es decir, uno que tiene tres funciones. Por lo tanto, el espíritu humano es una unidad completa, compuesta de tres partes o funciones: conciencia, comunión e intuición. Estas tres partes del espíritu humano están reveladas en la Biblia.
 
LA CONCIENCIA:La Conciencia, es el órgano que discierne entre lo correcto y lo incorrecto, lo cual no es afectado por el conocimiento intelectual; es más bien un juicio directo y espontáneo. Muchas veces, la conciencia condenará aún las cosas que los razonamientos de uno toleran. La obra de la conciencia es independiente del razonamiento humano y ella juzga y condena directa en su mayor parte. La función de la conciencia es múltiple. Si un hombre comete un error en su conducta, su conciencia lo censurará. Es fácil entender la Conciencia. Todos nosotros estamos familiarizados con ella. El percibir bien o mal es una función de la conciencia. El condenar o justificar es otra de sus funciones.
 
Dios, por medio de Su Espíritu, le habla a nuestro espíritu.La boca de nuestro espíritu es la conciencia. Del mismo modo, nuestro espíritu humano es el oído para escuchar a Dios. También, nuestro espíritu humano lo utiliza Dios, para discernir las intenciones de otras personas. Muchas veces, ha ocurrido, que una persona viene a proponernos un negocio incorrecto, y de pronto, percibimos su intención maligna, y decimos: le conocí su intención. Este tipo de investigación y juicio no lo puede hacer la mente sino el espíritu humano.
 
Déjate guiar por la voz de Su Espíritu. Realmente, la voz que escuchamos en nuestro interior, es la voz del Espíritu Santo hablándonos a través de nuestro espíritu. Siempre, en caso de duda, actué. Si oye en su interior una voz que le dice: Ve chequea la puerta o la ventana haber si está cerrada. No desobedezca esa voz. Ve inmediatamente a chequear la puerta o la ventana. Por lo regular, siempre que oímos esa voz, es para que hagamos algo que Dios desea que hagamos, advertirnos de un peligro, o de un engaño. Debemos ser obedientes a la voz de la conciencia. Es difícil que ella falle. De hecho, todo lo que vaya a hacer, hazlo cuando lo sienta en tu espíritu, pero cuando oiga esa voz, actúa inmediatamente.
 
Cuando a tu mente venga el nombre de una persona, comienza a orar por él o ella, o llámala en ese mismo momento. Nunca regale nada, si no lo ha sentido en tu espíritu. Cuando se obra por medio del sentir del espíritu, la mayoría de veces que lo hagamos, haremos la Voluntad de Dios. Pues, Dios, la mayoría de veces que nos habla, las haces a través de nuestro espíritu humano. Claro, esta, si la conciencia está limpia. Pues, si una persona no ha aprendido a obedecer la voz de su conciencia, el hablar de Dios por medio de su espíritu será muy poco. mientras mas limpia este la conciencia, mas Dios utilizara nuestra espíritu para hablarnos.
 
 La conciencia habla, aconseja, justifica, acusa y juzga a nuestra mente. Muchas veces, cuando vamos a hacer algo incorrecto, oímos dentro de nosotros esa voz que nos dice: No lo haga. Y cuando la desobedecemos y fracasamos, volvemos a escuchar la misma voz diciéndonos: Te lo dije. ¿Por que no me hiciste caso? También, cuando le obedecemos, oímos su voz diciéndonos: bien ha hecho. La conciencia, también, confirma, que su consejo viene de Dios. Cuando sentimos regalarle algo a una persona y lo hacemos, le oímos decir: ¿Como sabia usted que yo necesitaba eso? O gracia Señor, tu contesta las oraciones, me diste justo lo que te había pedido. ¿Ve como actúa Dios? Un hermano le pide a Dios en oración, para que le supla su necesidad. Luego, pone en tu espíritu el sentir para contestar las oraciones de ese hermano.
 
¿Dónde está localizada la conciencia? La conciencia la encontramos en Romanos 9:1 leemos:”...y mi conciencia me da testimonio en el Espíritu Santo”. Si comparamos a Romanos 9:1 con Romanos 8:16 veremos que la conciencia está localizada en el espíritu humano. Por un lado, el Espíritu Santo da testimonio con nuestro espíritu, y, por otro lado, nuestra conciencia da testimonio con el Espíritu Santo. Esto prueba que la conciencia tiene que ser una función de nuestro espíritu.
 
La conciencia juzga, condena y justifica: En 1 Cor. 5/3 el Apóstol Pablo dice que él juzgó en su espíritu a una persona pecadora. El juzgar significa condenar o justificar, los cuales son actos de la conciencia. Pero el Apóstol dice que en mi espíritu yo juzgo. Esto confirma que la función condenadora y justificadora está en el espíritu humano; por esto, la conciencia está en el espíritu humano.
 
La conciencia distingue entre lo correcto y lo incorrecto:El Salmo 51:10 habla de un espíritu recto dentro de mí, esto es, un espíritu el cual es recto. Distinguir lo correcto de lo incorrecto está relacionado con la conciencia, así que, este versículo también prueba que la conciencia está en el espíritu humano.
 
Acusar y condenar es otra función de la conciencia:el Salmo 34:18 se refiere a un espíritu contrito. Estar contrito significa que hemos comprendido que hicimos algo incorrecto. En otras palabras, nos acusamos y nos condenamos a nosotros mismos, lo cual es una función de la conciencia. Un espíritu contrito muestra que la conciencia está relacionada al espíritu humano. En Romanos 2:14-15 nos habla que la conciencia nos habla, nos acusa y nos condena cuando hacemos algo incorrecto. Juan 8:1-9 nos habla que acusados por su conciencia salían uno a uno. Este hecho comprueba, que cuando la conciencia nos advierte de que hicimos algo incorrecto, nos hace sentir mal. Por lo tanto, el juzgar lo correcto y lo incorrecto es una función de la conciencia. Cuando Jesús comenzó a escribir, acerca de la Ley del adulterio, la cual exigía que debían traer a los dos adúlteros para juzgarlos y condenarlos, la conciencia de ellos los acuso de haber violado la Ley. Por lo tanto, no tenían una posición legal para acusarla. Entonces, acusados por la conciencia se sintieron mal y se retiraron.
 
Para vivir la vida cristiana tenemos que mantener una conciencia limpia delante de Dios y los hombres: Hechos 24: 14-16 Pablo nos habla de tener una conciencia sin remordimiento delante de Dios y los hombres. Para que podamos beneficiarnos de los consejos de Dios, los cuales él nos transmite a través del nuestro espíritu humano y los hermanos, tenemos que mantener una conciencia limpia delante de Dios y los hombres.Mantener una conciencia limpia, significa, mantenernos en paz con Dios y nuestro prójimo. Eso significa que tenemos que mantenernos obedeciendo la palabra de Dios y nos hacerle daño a nuestro prójimo.
 
La conciencia puede endurecerse para no escuchar:La conciencia es el órgano que nos dice como estamos delante de Dios. Cuando hacemos algo incorrecto, si la conciencia está limpia, sentiremos y oiremos la voz de la conciencia acusándonos y nos exhortará a no hacer eso otra vez. En Deut. 2:30 dice: “endurecido su espíritu”, lo que significa que la conciencia fue endurecida. Ser endurecido en el espíritu significa no prestarle atención a la voz de la conciencia cuando nos advierte del peligro que corremos cuando vamos a hacer algo incorrecto. Cuando no hacemos caso a la voz de la conciencia ella se endurece, y cuando la conciencia se endurece, dejamos de escuchar la voz de ella. Entonces vivimos una vida pecaminosa delante de Dios. 1 Timoteo 4: 1-2 nos habla de una conciencia cauterizada. Cuando la conciencia de una persona se cauteriza, significa que tal persona no admite consejo y por eso vive una vida llena de pecado, de doble moral, de mentira y de hipocresía.
 
La conciencia nos advierte para que no suframos daños. Una vez, que no obedecemos la voz de la conciencia y hacemos lo que ella nos dice que no lo haga, surge la voz de la conciencia:” Ve, te lo dije que no lo hiciera, que primero consultara con el hermano tal. ¿Cómo nos sentimos en ese momento? Triste, apenado y avergonzados. ¿Quién no ha pasado por ésta experiencia? Todos.Muchas veces, la conciencia nos dice: “quita esa cosa de ese lugar”, pero resulta que no obedecemos, y ocurre que viene alguien y rompe tal cosa o ella se cae por el viento, ¿Cómo nos sentimos? Lo primero que escuchamos en la voz de la conciencia: ¿Ve te lo dije? Alguna vez, la conciencia nos dice: “Ve chequea la puerta, la ventana o la puerta del vehiculo, y no obedecemos, y ocurre que viene un ladrón se mete y nos roba. ¿Qué viene luego? la acusación, el lamento y perdida de nuestros bienes.
 
La conciencia funciona a través de la obediencia:Para que la conciencia funcione adecuadamente, la persona tiene que mantenerla limpia y haber aprendido el hábito de la obediencia. Hechos 26: 19 nos habla de no ser rebelde a la visión celestial. Cuando la conciencia nos habla, tenemos dos opciones: o aceptamos su consejo o lo rechazamos. Ya sabemos, lo que significa desobedecer la voz de la conciencia. Cuando no obedecemos, sufrimos muchos y nuestra vida cristiana es un desastre. Por lo tanto, para tener una vida moral y espiritual exitosa tenemos que aprender a obedecer los consejos que nos da la conciencia y los consejos que Dios nos da a través de Su palabras y los hermanos. Pues es imposible vivir una vida moral y espiritual sin una conciencia limpia.
 
¿Cómo mantenemos limpia la conciencia? Obedeciendo su voz. Cada vez que fracasamos por no obedecer, debemos aprender esa lección, para no repetir el mismo error. Cuando hablamos una mentira debemos confesar ese pecado. Cuando engañamos a alguien, debemos confesar ese pecado y cuando ofendemos a alguien, debemos pedir perdón. Así es que mantenemos una conciencia limpia.
 
LA INTUICIÓN: La intuición es el órgano que está en nuestro espíritu para tener contacto con Dios, el cual nos guía a adorar a Dios. Por medio de la intuición recibimos conocimientos y revelaciones directamente de Dios. En nuestro espíritu hay tal órgano o función, éste órgano actúa independiente de la razón, circunstancia o trasfondo. En 1 Corintios 2:9-10- habla de las cosas de Dios que el hombre no las puede entender con su mente ni con su oído, más por medio del espíritu humano que está en él. “empero Dios nos las reveló a nosotros por Su Espíritu”. Dios es Espíritu y le revela a nuestro espíritu lo que él desea que hagamos. Job 32: 8 dice: “ciertamente espíritu hay en el hombre, y el Espíritu del Omnipotente le hace que entienda”.
 
La intuición es el oído del espíritu humano para escuchar a Dios, así como la conciencia es la boca del espíritu: el oído o la intuición escucha y le transmite a la conciencia lo que oye de Dios. Luego, la conciencia le transmite a la mente y la mente le transmite a la voluntad, y la voluntad es que da la orden para que el cuerpo ejecute lo que dice la mente. Muchas veces, cuando estamos leyendo la Biblia, sentimos en nuestro interior que nos dice: “detente, esto quiere decir esto y aquello”. En ese momento, sentimos que algo toma nuestra mente y nos guía a otro versículo para poder entender lo que otro versículo dice. ¿Qué es eso? Es el Espíritu Santo enseñándonos a través de nuestro espíritu.
 
La intuición y la conciencia funcionan juntos para darnos a entender las cosas de Dios. Ambas son funciones del espíritu humano. Una recibe (la intuición) Y la otra transmite (la conciencia).Y muchas veces, cuando logramos entender algún versículo que habíamos leído muchas veces, decimos: “ahora lo entiendo”, y tanto tiempo que había leído ese versículo y es ahora que lo entiendo. Ese entendimiento lo recibimos del Espíritu por medio de la intuición y no por medio de la mente. Una vez, usted escucha la palabra, pero el entendimiento de esa palabra, usted llegar a entenderlo no por medio de su mente, sino por medio del Espíritu Santo que se la da a entender a su espíritu. Este sentir espiritual directo, que recibimos en nuestro espíritu de parte del Espíritu Santo para oír a Dios, demuestra que la intuición está en nuestro espíritu humano. A un espíritu, solo entiende otro espíritu. Los asuntos espirituales solo lo administran y los entienden espíritus.
 
Conocer las cosas de Dios, gemir y el estremecerse en espíritu es una función de la intuición:en Marcos 2:8 dice: “Y conociendo luego Jesús en Su espíritu”. Note, que dice que Jesús conoció por medio de Su espíritu la intención de ellos. ¿Quién le reveló a Jesús la intención de ellos? El Espíritu De Dios se la reveló a su espíritu. En Marco 8:12 dice: “Y gimiendo en Su espíritu”. En Juan 11:33 dice: “Se estremeció en espíritu”. El conocer los asuntos espirituales, gemir ante Dios y estremecerse en espíritu, son funciones de la intuición. Por medio de la intuición escuchamos la voz de Dios, los consejos de Dios y las revelaciones de Dios. 
 
A un espíritu lo conoce y lo escucha otro espíritu:En Juan 4: 24 nos habla que Dios es Espíritu, y para adorarlo es por medio de nuestro espíritu humano. Así que se adora a Dios por medio de nuestro espíritu. En Jon 32:8 nos habla de que hay un espíritu en el hombre y que el Espíritu del Omnipotente hace que él entienda. En 1 corintios 2:10 nos habla que Dios por medio de Su Espíritu le revela a sus ministros sus cosas espirituales. En Romanos 8:16 nos habla que el Espíritu da testimonio a nuestro espíritu que somos hijos de Dios. Todos estos versículos sólo nos dan a entender una sola cosa: “Que el Espíritu Santo le revela a nuestro espíritu las cosas espirituales que él desea que entendamos”, y que es por medio de la intuición que escuchamos y adoramos a Dios.
 
Cada hijo de Dios debe obedecer la voz de la conciencia, para que pueda adorar y servirle a Dios según Su Voluntad:Por medio de la intuición, se percibe lo que una persona en ese momento está pensando, esta percepción es absolutamente diferente a la percepción que realiza la mente. Esta percepción es espiritual y directa, y no depende de la ayuda de la mente; no necesitamos la ayuda de la mente, ni de la parte emotiva, ni de la voluntad para tener este conocimiento espiritual, ya que viene directamente de la intuición. Por medio de la intuición el hombre puede conocer las cosas espirituales, mientras que la mente sólo le permite tener entendimiento intelectual.
 
El creyente debe obedecerla voz de la conciencia y la instrucción de la intuición. La comunión que se tiene en el espíritu es la adoración a Dios. La mente, la parte afectiva y la voluntad son órganos del alma y no pueden adorar a Dios. A Dios no se conoce por medio de nuestros pensamientos, ni nuestras emociones, ni nuestros deseos. A Dios se le conoce directamente por medio de la intuición que está en el espíritu humano, es decir, por medio del hombre interior, el espíritu humano, y no por medio del alma, que es el hombre exterior. Las cosas espirituales son expresadas y enseñadas por espíritus: Cuando una persona habla de las cosas físicas, está hablando la persona. Pero cuando habla de las cosas espirituales, quien habla a través de él es un espíritu.
 
Los asuntos espirituales los habla Dios a través de Sus Siervos. O los hablan los demonios a través de personas que ellos han logrado engañar. Por lo tanto, cada hijo de Dios tiene que aprender a identificar al Espíritu de Dios hablando a través de una persona, y a un demonio, espíritu, actuando por medio de una persona. Los asuntos espirituales los administran espíritus a través de personas. En los Hechos 16:16-19 nos dice: Hechos 16:16 Una vez, cuando íbamos al lugar de oración, nos salió al encuentro una joven esclava que tenía un espíritu de adivinación. Con sus poderes ganaba mucho dinero para sus amos. Hechos 16:17 Nos seguía a Pablo y a nosotros, gritando: Estos hombres son siervos del Dios Altísimo, y os anuncian el camino de salvación. Hechos 16:18 Así continuó durante muchos días. Por fin Pablo se molestó tanto que se volvió y reprendió al espíritu: ¡En el Nombre de Jesucristo, te ordeno que salgas de ella! Y en aquel mismo momento el espíritu la dejó. Hechos 16:19 Cuando los amos de la joven se dieron cuenta de que se les había esfumado la esperanza de ganar dinero, echaron mano a Pablo y a Silas y los arrastraron a la plaza, ante las autoridades. Quien adivinaba era el espíritu, un demonio. No era la muchacha. Pues, cuando el espíritu salio de ella, ya no podía adivinar.
 
Cada persona es un espíritu. En 1 Juan 4:1 dice: “Amados, no crea a todo espíritu, sino prueba los espíritus para saber si proceden de parte de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el mundo”. Primero nos habla de espíritu y luego no dice falsos profetas, estas palabras se refieren a la persona. Cuando una persona tergiversa, anula y malinterpreta la palabra de Dios, no lo hace él como persona, sino que quien lo hace a través de él es un espíritu de demonio. De ahí el término: “falso profeta”. 
 
Para más información y contacto, Inocencio Rodríguez MOVIL 829-801-9407. 809-918-5588.
e-mail: hermanochencho777@hotmail. Com.
 
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